La cooperación Sur-Sur es una herramienta fundamental y jugará un rol clave para avanzar hacia el estilo de desarrollo que promueve la Agenda 2030, señalaron autoridades de varios países y expertos internacionales reunidos en un seminario en la sede de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en Santiago, Chile.
El seminario internacional Iberoamérica frente al desafío de los Objetivos de Desarrollo Sostenible: una mirada desde la cooperación Sur-Sur, organizado por el Programa Iberoamericano para el Fortalecimiento de la Cooperación Sur-Sur, la Agencia Chilena de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AGCID) y la CEPAL, fue inaugurado el miércoles 13 de abril por Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva del organismo regional de las Naciones Unidas; Jaime Miranda, Viceministro de Cooperación para el Desarrollo de El Salvador; Salvador Arriola, Secretario para la Cooperación de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB) y Alfredo Labbé, Subsecretario (s) de Relaciones Exteriores de Chile.
En el evento, que se prolongará hasta el jueves 14 de abril, se analizarán las perspectivas y desafíos de los países iberoamericanos y el rol de la cooperación internacional –en especial la cooperación Sur-Sur- en la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Se trata de una iniciativa que refuerza la complementariedad de los trabajos de la CEPAL, el Programa Iberoamericano para el Fortalecimiento de la Cooperación Sur-Sur, el Gobierno de Chile (a través de la AGCID) y la SEGIB en estas materias.
En sus palabras de bienvenida, Alicia Bárcena destacó la importancia de la cooperación horizontal y triangular (realizada con los países donantes) para lograr el nuevo modelo que exige la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y sus objetivos, aprobada el año pasado por los países miembros de las Naciones Unidas.
“El estilo de desarrollo actual se ha vuelto insostenible. Necesitamos un cambio de paradigma y aquí la cooperación Sur-Sur juega un rol central”, dijo Alicia Bárcena, quien destacó los desafíos que se abren respecto a la concepción y gobernanza del sistema internacional y al debate acerca de las formas de ayuda.
En ese sentido, la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL insistió en que el sistema de cooperación internacional debe buscar una respuesta integral y amplia para el problema de desarrollo, con el fin de cambiar la lógica de niveles de ingreso per cápita para clasificar a los países de renta media, como los de América Latina y el Caribe, e indicó que se debe pasar a una evaluación más amplia que considere el cierre de las distintas brechas estructurales que estas naciones enfrentan.
En una posterior ponencia ante los asistentes, detalló que estas brechas tienen que ver con el ingreso y la desigualdad; la inversión, productividad e innovación; la infraestructura; la educación y la salud, a las que se suman brechas en materia financiera y fiscal, de género y medioambiente.
En su presentación, la alta funcionaria de las Naciones Unidas insistió en la importancia del espacio regional para lograr una complementariedad entre instituciones mundiales y regionales, dar mayor sentido de pertenencia regional y subregional y fortalecer la integración productiva, entre otras acciones.
Bárcena destacó que la reunión se ve enriquecida por la presencia de delegaciones de países del Caribe e hizo una especial mención a la propuesta presentada por la CEPAL para el alivio de la deuda de los países del Caribe, en particular de Jamaica, mediante la creación de un Fondo de Resiliencia que permita financiar la inversión para la adaptación y mitigación de los efectos del cambio climático.
Jaime Miranda indicó que en el actual contexto mundial de la Agenda 2030 la cooperación deberá marcar nuevas pautas y enfrentar importantes desafíos. Para el cumplimiento de los ODS, será necesario fortalecer todas las modalidades de cooperación, incluyendo las prácticas desarrolladas en materia de cooperación Sur-Sur y cooperación triangular, dijo.
“Será fundamental ampliar la gama de actores y prácticas para crear nuevas estrategias de cooperación Sur-Sur, generar marcos de alianzas más inclusivos y renovar esfuerzos conjuntos en los espacios regionales”, declaró el viceministro salvadoreño.
Salvador Arriola entregó un saludo en nombre de Rebeca Grynspan, Secretaria General Iberoamericana (SEGIB), en el cual enfatizó que la cooperación Sur-Sur y la cooperación triangular son elementos clave para cumplir los ambiciosos objetivos de la Agenda 2030. “Debemos continuar trabajando en la construcción de un espacio iberoamericano que sea modelo de cooperación para que nadie se quede atrás en nuestra marcha hacia un futuro mejor”, señaló.
Por su parte, Alfredo Labbé resaltó la importancia de profundizar la unidad de la región frente a los desafíos internacionales, con una mirada Sur-Sur. “Debemos buscar una voz propia regional que distinga a los países latinoamericanos y caribeños y los identifique. Para eso es esencial lograr consensos y hablar con una sola voz ante la comunidad internacional”, declaró.
En el marco de este encuentro, el jueves 14 de abril se realizará una reunión de la Mesa Directiva de Cooperación Sur-Sur de la CEPAL, la cual servirá de preparación para la sesión sobre el mismo tema que se realizará durante el trigésimo sexto período de sesiones del organismo, a efectuarse en México del 23 al 27 de mayo. Dicha sesión tratará sobre los desafíos que se generan para la cooperación Sur-Sur a partir de la implementación de la Agenda 2030 y los acuerdos de la conferencia de Addis Abeba (de julio de 2015) sobre financiamiento para el desarrollo.
