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El rol del Estado es clave para garantizar la autonomía económica de las mujeres y avanzar hacia una sociedad del cuidado

13 de julio de 2021|Noticias

Representantes de gobierno y de organismos internacionales participaron en un evento organizado en el marco del mes de actividades dedicadas al desarrollo en transición.

El rol del Estado es clave para garantizar la autonomía económica de las mujeres y avanzar hacia una sociedad del cuidado, con miras a una recuperación transformadora con sostenibilidad e igualdad, coincidieron representantes de gobierno y especialistas de América Latina y Europa en un evento organizado por la CEPAL en el marco del mes del Desarrollo en Transición: Diálogos para trazar nuevos caminos para América Latina y el Caribe.

En el encuentro La autonomía de las mujeres y la economía del cuidado en el marco de una recuperación transformadora, sostenible y con igualdad participaron Mario Cimoli, Secretario Ejecutivo Adjunto de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL); Nadine Gasman, Presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres de México, en calidad también de copresidenta del Foro Generación Igualdad; María José Abud, Subsecretaria de la Mujer y la Equidad de Género del Gobierno de Chile, país que preside la Mesa Directiva de la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe; Juan Daniel Oviedo, Director del Departamento Administrativo Nacional de Estadística de Colombia, país que preside, a su vez, la Conferencia Estadística de las Américas, y Marisol Touraine, Experta del Área de Políticas de Igualdad de Género de EUROsociAL+ y Presidenta de UNITAID, con la moderación de Ana Güezmes, Directora de la División de Asuntos de Género de la CEPAL.

En su discurso de apertura, Mario Cimoli, Secretario Ejecutivo Adjunto de la CEPAL, planteó la urgencia de incorporar la perspectiva de género no solo en todos los planes y programas de recuperación pospandemia, sino también en todas las políticas fiscales, industriales, tecnológicas y de generación de empleo de corto y largo plazo para garantizar la autonomía económica de las mujeres con un horizonte de igualdad y sostenibilidad. La economía del cuidado es un sector dinamizador, motor de la recuperación y acelerador de la igualdad, dijo.

Es hora de pasar de los discursos a la acción, instó el alto funcionario. “Demos un salto de calidad, pidamos cuenta de los anuncios en materia de igualdad de género. Necesitamos poner en la primera línea política, analítica y metodológica a las políticas orientadas a la autonomía económica y a la sociedad del cuidado”, resaltó.

Nadine Gasman reconoció que hay una demanda hacia los gobiernos para que desarrollen sistemas nacionales de cuidados, y destacó, en este sentido, el llamado de la CEPAL a construir nuevos pactos sociales, políticos y fiscales que pongan en el centro de las políticas el bienestar de las personas y la autonomía de las mujeres en su diversidad, entre ellas, las mujeres indígenas, rurales y afrodescendientes.

La Presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres de México indicó que su país está en proceso de aprobar una reforma constitucional para que el cuidado sea considerado un derecho, y aseguró que están trabajando en la ley del sistema nacional de cuidados. También llamó a los países a sumarse a la Alianza Global por los Cuidados, iniciativa liderada por México y ONU Mujeres en el marco del Foro Generación Igualdad y que cuenta con la participación de la CEPAL.

María José Abud, del Gobierno de Chile, compartió algunas de las medidas implementadas por su país para hacer frente a la pandemia, entre ellas, un subsidio al empleo con enfoque de género, la extensión del posnatal durante la emergencia y el fortalecimiento de diversos programas de cuidados. También convocó a los países de la región a ser parte de la Alianza Regional para la Digitalización de las Mujeres, lanzada en febrero por Chile en el marco de la 60 Mesa Directiva de la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe. “Esta alianza ya cuenta con la participación de países como Uruguay, Costa Rica y Panamá, de organismos intergubernamentales como la CEPAL y ONU Mujeres y de líderes del sector privado como Microsoft”, resaltó.

La Subsecretaria del Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género de Chile también subrayó la mirada visionaria del Compromiso de Santiago, aprobado durante la XIV Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe (celebrada en enero de 2020 en Chile, antes del surgimiento de la pandemia), que llama a “implementar políticas contracíclicas sensibles a las desigualdades de género para mitigar los efectos de crisis económicas en la vida de las mujeres, y a promover la economía del cuidado, así como a diseñar sistemas integrales de cuidado desde una perspectiva de género, interseccionalidad e interculturalidad y de derechos humanos que promuevan la corresponsabilidad entre mujeres y hombres, Estado, mercado, familias y comunidad”.

Por su parte, Marisol Touraine compartió la experiencia de Europa en materia de políticas de cuidado, las cuales permitieron no solo liberar el tiempo de las mujeres para mejorar su inserción laboral en general, sino también forjar un sector económico dinamizador que produce empleos de calidad para muchas de ellas.

La experta de EUROsociAL+ y Presidenta de UNITAID explicó que Europa transita hacia una nueva etapa en las políticas de cuidado, como parte de su Plan “Nueva Generación”, que incluye fortalecer la formación certificada por el Estado para ejercer los cuidados, reforzar la protección social, reconocer una carrera dentro del sector e incorporar masivamente la tecnología en estas actividades. “No hay política de cuidado sin que haya una regulación estatal de la formación y de la protección social de los y las cuidadoras”, dijo, e hizo un llamado a “politizar el cuidado” en el sentido de mayor presencia de los gobiernos y de las políticas públicas.

Durante su intervención, Juan Daniel Oviedo, del Departamento Administrativo Nacional de Estadística de Colombia, subrayó la importancia de contar con información estadística actualizada y desagregada “para reconocer efectivamente en qué dimensiones se presentan las principales barreras para la autonomía de las mujeres en la región”. Recalcó, asimismo, la severa caída del empleo y las altas cifras de desempleo que enfrentan las mujeres a más de un año de la pandemia, así como la sobrecarga de tiempo y trabajo no remunerado sobre las mujeres que se ha acentuado durante este período. La Encuesta Nacional de Uso del Tiempo – ENUT realizada por Colombia evidencia que “mientras las mujeres dedicaron en promedio 8 horas cada día a actividades de trabajo no remunerado entre septiembre y diciembre de 2020, los hombres dedicaron 3 horas a estas mismas actividades”.

“América Latina y el Caribe, con el liderazgo de la División de Asuntos de Género y de la CEPAL, ha logrado avanzar de forma significativa, junto a la unión de esfuerzos de otros organismos como ONU Mujeres. Se ha logrado que todas las oficinas de estadísticas seamos conscientes que debemos producir información estadística sensible al género” para promover políticas públicas que contribuyan, en la actual coyuntura, a una recuperación transformadora, sostenible y con igualdad, aseguró.

Finalmente, Ana Güezmes invitó a las ministras y autoridades para el adelanto de las mujeres a participar en la próxima reunión de la Mesa Directiva de la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe programada para septiembre, que contará con un panel sobre el tema de la sociedad del cuidado.  La CEPAL ha llamado a transitar hacia una sociedad del cuidado que priorice la sostenibilidad de la vida, el cuidado del planeta y garantice los derechos de las personas que requieren cuidados, así como los derechos de las personas que proveen dichos cuidados; que contrarreste la precarización de los empleos relacionados con el sector de los cuidados y mejore las condiciones laborales y su formalización; y que visibilice los efectos multiplicadores de la economía del cuidado en términos del bienestar, la redistribución de ingresos y del tiempo, el empleo y el crecimiento de las economías, dijo.

“No podemos avanzar hacia un nuevo modelo de desarrollo sin un abordaje desde los Estados, la integración  regional y las alianzas multilaterales, con participación de las organizaciones feministas. Por eso nos interesa mucho la conversación entre América Latina y el Caribe y Europa y articular propuestas de corto plazo para mitigar los efectos de la pandemia, con políticas de mediano y largo plazo que sean claramente transformadoras y estructurales para el logro de la igualdad sustantiva, en los hechos”, remarcó.

El panel sobre autonomía de las mujeres fue uno de los cuatro eventos que organiza la CEPAL en el marco de los diálogos sobre el desarrollo en transición, convocados por la CEPAL, la Comisión Europea y el Centro de Desarrollo de la OCDE.