Frente a la extrema sequía que ha impactado la productividad de muchos países de la región, el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) presentó la Iniciativa Hemisférica Agua y Agricultura durante la reunión de su Comité Ejecutivo. Esta iniciativa busca que el sector agrícola contribuya a enfrentar la crisis hídrica regional, teniendo en cuenta que el agua es fundamental para la agricultura y, en consecuencia, la seguridad alimentaria.
Es por ello que en la sede central del IICA en San José de Costa Rica, 14 ministros de Agricultura y otros altos funcionarios del sector agropecuario de las Américas, representando a 25 países, respaldaron la iniciativa y resaltaron la importancia del IICA como plataforma para intercambiar experiencias e información y promover buenas prácticas.
El proyecto tiene como objetivo fortalecer las capacidades y promover alianzas estratégicas público-privadas entre los países miembros del IICA para mejorar la gestión del agua en la agricultura, apoyando a los ministerios y organismos encargados. Esto busca fomentar un trabajo colectivo para asegurar que los valiosos recursos hídricos de las Américas contribuyan a un desarrollo más verde, inclusivo, resiliente y sostenible, incluso frente al impacto del cambio climático.
El director general del IICA, Sr. Manuel Otero, anunció que en septiembre convocará a cuadros técnicos y organismos de financiamiento para definir acciones concretas y establecer metas verificables para implementar la iniciativa.
La propuesta del IICA se enfoca en cuatro ejes de trabajo con metas medibles. El primero es la producción y almacenamiento de agua a través de la recuperación de suelos degradados, la preservación de los bosques y la promoción de buenas prácticas agrícolas como la siembra directa. El segundo es mejorar la eficiencia en el uso del agua en la agricultura mediante la innovación tecnológica.
El tercer eje se refiere a la gobernanza y busca fortalecer los mecanismos y capacidades relacionados con la gestión del agua en la agricultura por parte de los ministerios e instituciones responsables del agua. Finalmente, el cuarto eje impulsa las inversiones en captación, almacenamiento, distribución y riego en finca, mejorando la planificación, asignación y articulación público-privada de los recursos de inversión en los países.
La iniciativa del IICA destaca que el agua es un activo estratégico y limitado. Por lo tanto, es fundamental desarrollar infraestructuras hídricas para gestionar, almacenar y distribuir agua de manera sostenible y eficiente. Además, promueve el uso eficaz y eficiente del agua, enfocándose en la productividad del agua, el riego y la gestión del suelo.
En este contexto la CEPAL, mediante la intervención de la Sra. Rayén Quiroga, Jefa de la Unidad de Agua y Energía de la División de Recursos Naturales de CEPAL, destacó la preocupante situación del acceso al agua potable y al saneamiento seguro en la región. Expresó que todavía hay 161 millones de personas en América Latina y el Caribe que carecen de acceso a agua potable gestionada de forma segura, y una cifra aún más alarmante de 431 millones de personas que no cuentan con acceso al saneamiento seguro.
Estas cifras son impactantes y evidencian un desafío inmenso para la región. La falta de acceso a servicios básicos de agua y saneamiento tiene un profundo impacto en la calidad de vida y la salud de millones de personas, además de afectar negativamente el desarrollo social y económico de las comunidades.
Es fundamental reconocer que el problema del agua no se limita únicamente a la agricultura; es un desafío multidimensional que afecta a diversos sectores y comunidades. Subrayó la necesidad de rediseñar los sistemas de gobernanza y los instrumentos de gestión actuales para abordar esta problemática. Esto implica la responsabilidad de las autoridades políticas y jurídicas de establecer incentivos adecuados y mecanismos efectivos de fiscalización para alcanzar los objetivos comunes en materia de gestión hídrica.
La Sra. Quiroga resaltó la importancia de la acción coordinada entre los diferentes actores y sectores para abordar el acceso al agua y saneamiento como un problema prioritario. La gestión del agua debe ser un esfuerzo conjunto que involucre tanto a los gobiernos como al sector privado, la sociedad civil y organismos internacionales.
Es importante destacar que la garantía del acceso al agua y al saneamiento seguro no solo es un derecho humano fundamental, sino también un elemento esencial para alcanzar el desarrollo sostenible y la prosperidad en la región. Abordar esta situación requerirá un enfoque holístico, donde la gestión del agua para la agricultura, como propone la Iniciativa Hemisférica Agua y Agricultura del IICA, sea parte de un esfuerzo más amplio para asegurar que todos los habitantes de la región tengan acceso a servicios básicos de agua y saneamiento adecuados, Concluyó.
Finalmente se celebraron reuniones y presentaciones sobre la transición energética y la electromovilidad. Participaron el Viceministerio de Energía, el viceministro de Transporte (Carlos Ávila), empresas proveedoras de energía como Roberto Quiroz, Gerente de Electricidad ICE, y el Regulador General en Energía, entre otros. Durante estas reuniones, se intercambiaron puntos de vista sobre la transición energética en América Latina y el Caribe, en el contexto del Proyecto CISI (Proyecto de Ciudades Inteligentes, Inclusivas y Sostenibles de responsabilidad de la división y financiado por la cooperación alemana) para el caso de San José, así como los futuros proyectos de Desarrollo Sostenible de Energía liderados por la CEPAL. Costa Rica expresó su compromiso en participar en estos proyectos y compartir información de manera oportuna. Es importante destacar que Costa Rica ha sido un pionero en inversiones en energía renovable, incluyendo hidroeléctrica, geotérmica y solar desde la década de los setenta, además de su reciente desarrollo en electromovilidad e hidrógeno verde.
Como acciones futuras, se ha acordado con las autoridades una misión de cooperación técnica con el propósito elaborar estudios en el contexto del Proyecto CISI II sobre: marcos regulatorios y el impacto en la demanda en la red eléctrica por la electrificación del transporte público.
