República Dominicana se ha visto expuesta a sequías e inundaciones más recurrentes en los últimos años, además de alza de temperaturas y diversos huracanes, colocando a numerosas familias dominicanas en mayor vulnerabilidad. El cambio climático representa una amenaza para la seguridad alimentaria y nutricional, las condiciones de vida y el ingreso de la población rural, ya que afecta a la actividad agrícola, incluyendo los alimentos básicos y productos de exportación como el café. Así, el reto es transitar hacia una agricultura más sostenible e incluyente para proteger a la población pobre del campo y consumidores de alimentos en la ciudad.
En la tercera fase de la iniciativa de ECC-CARD, entran los Ministerios de Agricultura de CAC y la República Dominicana. Dentro de esta fase se incluye un componente para la República Dominicana, dentro del cual se acuerda incluir una cooperación técnica para analizar los impactos potenciales del cambio climático en la agricultura, específicamente para el sector cafetalero. Lo cual obedece a solicitudes realizadas por el Ministerio de Agricultura, el Consejo Nacional de Cambio Climático y el Mecanismo de Desarrollo Limpio (CNCCMDL), y el Consejo Dominicano del Café (CODOCAFE), actualmente el Instituto Dominicano del Café (INDOCAFE).
Los resultados y el proceso de análisis realizados para responder a estas solicitudes fueron presentados en este seminario. Se contaron con importantes contribuciones de datos de instituciones nacionales como El Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDHRI), la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET), y también del Centro del Agua del Trópico Húmedo para América Latina y el Caribe (CATHALAC) como instancia regional, así como una consultoría técnica para actualizar y procesar los datos históricos (temperatura y precipitación) en las bases de datos meteorológicas sintéticas, utilizando una metodología que combina bases de datos meteorológicas de modelos atmosféricos y registros reales de los Servicios Meteorológicos Nacionales para proporcionar registros completos en tiempo y espacio, lo cual será de utilidad para el país. También se contó con las bases de datos de rendimientos de café por provincia proporcionadas por CODOCAFE. Con estos insumos, y otras variables socio-económicas, se prepararon funciones de producción que estiman el efecto de las variables climáticas sobre los rendimientos de café, tanto en el período histórico de referencia como con escenarios de cambio climático. La consultoría técnica para las bases de datos como la realización del taller se financian con fondos del proyecto “Impacto del Cambio Climático y Opciones de Política para Centro América y República Dominicana” del BID/NDF. CEPAL ha contribuido con la asignación de funcionarios técnicos a esta cooperación técnica.
Objetivos del Evento:
Contribuir a la discusión de opciones para la respuesta del sector cafetalero al reto de cambio climático, con análisis y discusiones técnicos sobre los impactos potenciales del cambio climático en este sector productivo.
Aumentar el conocimiento sobre cambio climático y el manejo de datos para el análisis de impactos potenciales.
Facilitar una discusión sobre retos para la producción del café y líneas de acción para responder a los efectos del cambio climático.
Participantes:
Funcionarios técnicos nacionales responsables en el sector agrícola y café principalmente.
Funcionarios técnicos nacionales de instituciones que manejen datos climáticos, proyectos de inversión pública agrícola, y otras instancias que puedan hacer uso de este conocimiento técnico.
Conclusiones y recomendaciones:
Evaluar varias medidas de adoptación para asegurar el efecto mitigante del subsector de café y los cobeneficios alcanzables con actividades contempladas o con un razonable esfuerzo adicional.
Evidenciar los cobeneficios potenciales de las medidas propuestas por sus impactos en la situación económica y bienestar de los productores y sus familias, en otros efectos positivos ambientales y de sostenibilidad, y en su contribución potencial en la transición hacia economías sostenibles y bajas en emisiones de GEI.
Avanzar lo más rápido posible en contar con fincas certificadas, con huellas de GEI, agua y ambientales estimadas, los cuales podrán contribuir a estimar las emisiones del subsector como mayor referencia a la realidad nacional.
Contar con acciones para desarrollar análisis agroclimáticos más locales y boletines especiales para zonas cafetaleras, con avisos sobre clima a corto plazo.
Mejorar las estrategias de comunicación de resultados de investigaciones sobre cambio climático hacia los productores y acciones de investigación-acción con ellos a beneficio de sus oportunidades de mitigación y adaptación.
Finalmente, se surgió varias recomendaciones en relación a las cuatro líneas de acción propuestas en el perfil de NAMA: reducción del uso de fertilizantes nitrogenizados y las emisiones de N2O, evitar emisiones de metano mediante mejor tratamiento y uso de aguas mieles, mejor uso y gestión de biomasa como fuente de energía en lugar de leña, y captura de carbono por ampliación de sistemas agroforestales.
Noticias
Nota informativa
Nota informativa