Muy buenos días a todas las personas que nos acompañan en este Seminario de Lanzamiento del primer Panorama de las Políticas de Desarrollo Productivo en América Latina y el Caribe.
Quiero extenderle un saludo especial a todos los y las panelistas internacionales que nos acompañan el día de hoy y a los cientos de personas que se están conectadas vía todas las plataformas virtuales de la CEPAL.
Aprovecho para dar una información logística: este seminario cuenta con traducción simultánea español-inglés-portugués. Por lo que les agradecemos a todos los que requieran de este servicio, ajustar sus respectivos canales en la plataforma de Zoom, en la página web de CEPAL y en el canal de Youtube.
Estimadas y estimados participantes,
Como saben, la CEPAL cuenta con un número importante de reportes insignia anuales sobre América Latina y el Caribe: el Panorama Social, el Panorama Fiscal, el Estudio Económico, el Balance Preliminar de las Economías, un reporte sobre inversión extranjera directa, y uno sobre comercio, entre otros. Pero no tenía, hasta ahora, un informe anual sobre los retos del desarrollo productivo, que ha sido uno de los temas que desde siempre han estado en el centro de las reflexiones de la CEPAL.
Desde que llegué a CEPAL me propuse el objetivo de fortalecer el trabajo de la CEPAL en esta área, entre otras, y una de las formas de hacerlo ha sido mediante la idea de sumar a los aportes de la CEPAL este Panorama de las Políticas de Desarrollo Productivo, con la intención de que sea una publicación anual.
Las primeras reflexiones de la CEPAL sobre este tema estuvieron centradas en estudiar el proceso cambio estructural, es decir, el paso de una predominancia del empleo y la producción de la agricultura hacia la industrialización, proceso que se veía como el camino hacia el desarrollo. Además, la CEPAL siempre trabajó en comprender lo que inicialmente se llamó el progreso técnico, que hoy día llamaríamos cambio tecnológico.
En décadas siguientes siguieron reflexiones y estudios sobre la productividad en la misma agricultura, los métodos para el progreso técnico, la orientación exportadora, la importancia de las mipymes, el rol de los conglomerados y las grandes empresas, la digitalización de los procesos productivos, entre muchos otros temas. Y no podemos dejar de mencionar el papel de la integración económica en la industrialización y el desarrollo productivo.
Particularmente influyente fue el reporte Transformación Productiva con Equidad del año 1990, pero este es solo uno de muchas contribuciones en este campo.
Esta evolución del pensamiento de la CEPAL ha continuado hasta el día de hoy.
Sin embargo, el contexto actual hacía urgente llenar lo que vemos como un vacío en la conversación sobre las políticas de desarrollo productivo, por varias razones:
Primero, porque como explicaremos en más detalle en unos minutos, vemos a los países de la región sumidos en una trampa de baja capacidad para crecer. Y es en las PDP donde está gran parte del instrumental para que los países puedan salir de esta trampas y promover un crecimiento más alto, sostenido, inclusivo y sostenible.
Segundo, estamos en una era de revoluciones tecnológicas aceleradas: la digital; la biogenética; la revolución en las ciencias de la vida y de la salud; la nanotecnología, para citar solo algunas. La convergencia de estas y otras revoluciones tecnológicas en el mundo de la producción, la salud, la educación, el gobierno digital y otros campos, lo está cambiando todo. Las políticas de desarrollo productivo no pueden seguir siendo lo que fueron hace 30, 20 o incluso 10 años atrás. Deben reconocer estas nuevas realidades y plantearse qué capacidades desarrollar y cómo hacerlo para competir en el mundo moderno y promover el crecimiento y el empleo.
Tercero, enfrentamos una realidad geoeconómica y geopolítica muy diferente que hace 20 años, incluso que hace 10 años. En parte por eso, las políticas industriales han regresado a la palestra a nivel mundial, con países como EE.UU., China y la Unión Europea implementando importantes esfuerzos en esta materia.
Cuarto, el imperativo del desarrollo sostenible, que incluye transiciones tan importantes como la energética y hacia la electromovilidad, y la transición hacia la economía circular, la agricultura sostenible, y la mitigación y adaptación al cambio climático, de nuevo para citar solo algunas, hace que tengamos que repensar la transformación productiva y el crecimiento económico.
Estas son algunas de las razones que justifican de sobra elevarle el nivel de atención a las políticas de desarrollo productivo, a la discusión de los qué y los cómo para mover las agujas de la transformación productiva y la productividad.
Y ese es el objetivo de lanzar esta nueva serie anual titulada Panorama de las Políticas de Desarrollo Productivo en América Latina y el Caribe.
Este primer número tiene como subtítulo ¿Cómo promover la gran transformación productiva que requiere la región? Porque eso, ni más ni menos, es lo que requiere la región para crear prosperidad y un crecimiento socialmente inclusivo y ambientalmente sostenible: una gran transformación productiva
Y en él argumentamos, con evidencia, que se requiere profundizar y escalar las políticas de desarrollo productivo. Ese es el llamado y el significado de este Panorama.
Como este es el primer Panorama de las PDPs que se lanza, hoy hemos hecho un cambio en la dinámica usual de presentación de reportes emblemáticos.
Además de invitar a los medios de comunicación como es nuestra práctica, hemos organizado un seminario luego de la presentación del documento.
Este seminario contará con tres paneles en los que participarán un total de 15 comentaristas, todos ellos reconocidos especialistas en los temas de políticas de desarrollo productivo.
Sin más, vamos a proceder a hacerles una presentación del reporte, de manera muy resumida por supuesto.
Pero antes de iniciar, quiero expresar a Marco Llinás, Director de la División de Desarrollo Productivo y Empresarial de la CEPAL, y a todo el equipo de la división, por su gran trabajo durante más de un año para elaborar el producto que hoy les presentamos.
Quisiera también reconocer que esta publicación y parte de las investigaciones que la sustentan se beneficiaron del apoyo financiero por parte de la Comisión Europea, y la GIZ y BMZ de Alemania, a quienes le agradecemos mucho ese apoyo.
Comenzaré la presentación del Reporte yo mismo y luego le daré la palabra a Marco Llinás.
