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México y Chile avanzan en cubrir sus brechas y necesidades desde sus propias capacidades y creando herramientas bioinformáticas

30 de junio de 2021|Evento

Chile y México compartieron los logros, reflexiones y perspectivas del proyecto de cooperación sur-sur en biodiversidad y áreas protegidas en una sesión virtual albergada por la CEPAL del cierre del Proyecto BiBAP

La Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) de México, La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) del mismo país, el Ministerio de Medio Ambiente de Chile (MMA), el Instituto de Ecología y Biodiversidad (IEB- Chile) y Wildlife Conservation Society (WCS- Chile) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) compartieron los logros alcanzados y los productos realizados al cierre del proyecto binacional sobre biodiversidad y áreas protegidas, BIBAP.

El proyecto BIBAP que comenzó en octubre del 2017 tuvo como principal objetivo la transferencia de conocimientos, el intercambio de experiencias y la creación de capacidades humanas e institucionales para favorecer el avance hacía una gestión más sustentable en ambos países.

Como parte de los resultados de este proyecto se obtuvieron dos nuevas herramientas bioinformáticas que permitirán generar decisiones más informadas y proveer de plataformas para que las comunidades entreguen u obtengan información útil y relevante para la gestión ambiental de los países.

Una de las herramientas creadas fue SIMBIO, un sistema de información de monitoreo de la biodiversidad en Chile que pretende ampliar el conocimiento sobre la biodiversidad del país. Esta plataforma web permite que personas y organizaciones puedan aportar información sobre biodiversidad que permita generar datos sobre los ecosistemas terrestres, marinos, áreas protegidas, humedales, especies y programas de restauración.

La segunda herramienta se trata de un Barómetro de la Conservación de la Biodiversidad para México y Chile que busca responder preguntas de interés del público general, diseñada para dar información sobre los tipos de ecosistemas que se encuentran protegidos, las áreas protegidas existentes y la superficie protegida, entre otras preguntas.

En la ceremonia de cierre también se destacaron las actividades de intercambio de experiencias en las que se visitaron proyectos específicos de conservación y restauración de biodiversidad para la transferencia de buenas prácticas. Los productos de divulgación, especialmente las memorias gráficas, también fueron un resultado importante del proyecto BiBAP, creados para sintetizar el trabajo realizado y las lecciones aprendidas durante todo el proyecto colaborativo y que podría ser de mucha utilidad para otros países de la región.

En la sesión participaron y mandaron mensajes grabados las autoridades de las instituciones involucradas en el proyecto, de las agencias de cooperación para el desarrollo de Chile y México y los respectivos Embajadores. La secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, felicitó los logros del proyecto que están orientados a fortalecer las capacidades para los nuevos desafíos “México y Chile pertenecen a la coalición de países con alta ambición en conservación y por un lado están en la vanguardia de algunos avances ambientales, pero tienen altos niveles de degradación ambiental. Las amenazas que enfrenta su rico patrimonio natural y cultural pueden disminuir con una mejor gobernanza, con el fortalecimiento de las instituciones, de las capacidades humanas y financieras y con la participación de todos los sectores evitando retrocesos”.  Más adelante añadió: “El que México y Chile avancen en cubrir las brechas entre sus capacidades y necesidades identificando y traduciendo oportunidades y desafíos, no solo los beneficia a ellos, marca un liderazgo positivo en la región en un momento crucial para un mundo que enfrenta múltiples crisis que no podrán resolverse sin la colaboración y un multilateralismo activo”.

Carolina Schmidt, ministra del Medio Ambiente de Chile, también mandó un mensaje a la sesión resaltando como el proyecto BIBAP permite fortalecer la institucionalidad ambiental en el contexto de la creación del Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas en Chile. Por su parte, el Dr. José Sarukhán, coordinador nacional de CONABIO hizo alusión al rol que cumplen las instituciones y las herramientas que contribuyen al conocimiento en la gestión de recursos naturales y sobre la necesidad de aumentar los esfuerzos en la materia.

En la mesa redonda sobre las reflexiones y perspectivas del proyecto, se conversó sobre otras oportunidades de colaboración de Chile y México y de los desafíos futuros prioritarios en América Latina y el Caribe. Se mencionó la necesidad de mantener el intercambio de experiencias, dar gobernanza y continuidad a las herramientas creadas y generar un trabajo colaborativo para especies migratorias y compartidas, que debido al cambio climático y otros factores han ido en aumento. A su vez, se destacó la necesidad de generar un mensaje regional único sobre la importancia de la biodiversidad regional para el bienestar tanto de América Latina y el Caribe como para el mundo entero; y sobre los desafíos de restauración y de financiamiento en una región dónde los recursos públicos en la materia son escasos e incluso regresivos.

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Panelistas y autoridades presentes en la sesión de cierre del proyecto BIBAP

Panelistas y autoridades presentes en la sesión de cierre del proyecto BIBAP

Para culminar con el cierre del proyecto, la directora de la División de Recursos Naturales de la CEPAL, Jeannette Sánchez, destacó que invertir en información y en sistemas para su uso accesible es una condición necesaria para hacer un país desarrollado.

El proyecto BIBAP fue posible gracias al financiamiento otorgado por el Fondo de Cooperación Chile-México gestionado por la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID) y la Agencia de Cooperación Chilena Internacional para el Desarrollo (AGCID).