Descripción
Resumen En el presente estudio se busca demostrar el crucial papel que le cabe al sector financiero latinoamericano en una estrategia de crecimiento con equidad. Se comienza demostrando que su actual contribución a este objetivo es claramente perfectible. Luego, se demuestra que el sector financiero presenta un claro rezago competitivo, lo que ayuda a entender por qué los empresarios de la región lo identifican como el principal obstáculo para su crecimiento. Por otra parte, la falta de acceso y el alto costo del financiamiento para las Pymes, es un obstáculo para el crecimiento de la productividad y los ingresos de este sector donde labora el 70% de los pobres, por lo que constituye una causal del lento ritmo de superación de la pobreza y la permanencia de la inequidad distributiva que caracteriza a la región. Los análisis de países que se hace en el estudio ratifican las afirmaciones anteriores y también dan cuenta de una gran variedad de situaciones en la región. Las mejores prácticas regionales señalan las oportunidades que existen para superar las actuales deficiencias. A partir de ellas se hace una serie de sugerencias de política que cubren tres ámbitos: cambios en la institucionalidad y los marcos regulatorios; modificaciones legales que amplíen al acceso de la Pyme al crédito bancario; y mejoras en los sistemas de información crediticia. Estos cambios, particularmente el darle mayor transparencia al mercado, permitirá usar para la Pyme una serie de instrumentos que ya se utilizan con gran éxito en otros mercados: credit scoring, factoraje, securitización de créditos y activos. Lo que, sin duda, incrementará el flujo de financiamiento y reducirá su costo para la Pyme. En este estudio se termina sugiriendo que el importante esfuerzo de modernización del sector financiero que vivió la región en la década de los noventa, debe ser complementado por una segunda ola de reformas que tenga como objetivo explícito profundizar el sistema financiero. La falta de profundidad de éste es el principal rezago competitivo de la región en este ámbito. A la vez el estudio da cuenta de una relación estadísticamente significativa entre profundidad financiera y distribución del ingreso. Por lo mismo, la segunda ola de reformas financieras que se propone contribuiría tanto al crecimiento como a la equidad.