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La CEPAL organiza dos talleres sobre ‘vulnerabilidad y áreas verdes’ y, ‘resiliencia de los sistemas de salud pública’, en el marco del proyecto Oportunidades para una recuperación post pandemia más sostenible y bajo en carbono en ALC

22 de setembro de 2021|Nota informativa

La División de Desarrollo Sostenible y Asentamientos Humanos (DDSAH), de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (CEPAL), con el apoyo de la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción de Riesgo de Desastres (UNDRR) y Ciudades Capitales de las Américas frente al Cambio Climático (CC35), realizaron dos talleres titulados “Plan de Acción Climática de la ciudad de Guatemala: vulnerabilidad y áreas verdes (taller nº 1) y resiliencia de los sistemas de salud pública (taller nº 2).

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ciudades Guatemala CEPAL
ciudades Guatemala CEPAL

Santiago de Chile, 22 de octubre de 2021.

Dentro de los países de la región, las ciudades se han convertido en uno de los actores fundamentales para la acción climática y para la reducción del riesgo de desastres. Esta circunstancia es especialmente relevante para una región como América Latina y el Caribe (ALC) donde alrededor del 80% de su población vive en ciudades y en donde se concentra gran parte de la producción y el consumo. Por estas razones, resulta fundamental que las ciudades cuenten con Planes de Acción Climática (PAC) actualizados, dando lineamientos para priorizar las medidas de mitigación, adaptación, así como para la reducción del riesgo de desastres y la construcción de resiliencia, clave en la recuperación económica post pandemia y de bajo carbono.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), con apoyo de la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción de Riesgo de Desastres (UNDRR) y Ciudades Capitales de las Américas frente al Cambio Climático (CC35), han venido impulsando distintas iniciativas para contribuir en la realización de los PAC de cinco ciudades en la región. La CEPAL ha convenido con la Alcaldía de la ciudad de Guatemala, la realización de su PAC, en el marco del proyecto regional: “Oportunidades para una recuperación post pandemia más sostenible y bajo en carbono en ALC”, cuyo período de ejecución se ha planificado de julio a diciembre de 2021.

Como parte de las actividades de elaboración del PAC de la ciudad de Guatemala, se realizaron dos talleres bajo la iniciativa Desarrollando Ciudades Resilientes 2030 (MCR2030) que lidera UNDRR, y que permite la articulación con múltiples partes interesadas, para impulsar la resiliencia urbana. El primer taller, enfocado en ‘vulnerabilidad y áreas verdes’ se realizó el día martes 19 de octubre. El segundo taller, cuyo enfoque fue sobre ‘resiliencia de los sistemas de salud pública’, se realizó el día viernes 22 de octubre de 2021. Ambos talleres fueron realizados en modalidad on-line.

Como antecedentes, y entre 2016 y 2019, como parte del proyecto de UNDRR ‘Desarrollando Ciudades Sostenibles y Resilientes: Implementando el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres’, la Ciudad de Guatemala y otras seis ciudades de la región de las Américas y el Caribe aplicaron las herramientas de la Campaña Mundial Desarrollando Ciudades Resilientes y desarrollaron un Plan de Acción para la Reducción del Riesgo de Desastres. El Scorecard para ciudades resilientes permitió identificar las acciones necesarias para fortalecer la resiliencia de la ciudad. En 2020 Ciudad de Guatemala se convirtió en ciudad modelo de esta campaña.

La sesión del taller comenzó con la bienvenida de la Arquitecta María José Avendaño, de la Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad de la ciudad de Guatemala, en nombre del alcalde Ricardo Quiñonez, quien comentó que, anteriormente, se tuvo la oportunidad de realizar dos veces la aplicación de la herramienta de la iniciativa MCR2030, que permitió situar a la ciudad como modelo en los temas de resiliencia a nivel latinoamericano. En estos dos talleres que se llevarán a cabo, se han planteado dos temas fundamentales: vulnerabilidad y áreas verdes, y la resiliencia de los sistemas de salud pública, importantes para ser incluidos en el PAC.  Se pretende también, que el cinturón ecológico municipal sea parte de esta evaluación de cara al PAC. La Sra. Avendaño finalizó su intervención enfatizando sobre la certeza que el PAC no será solo un trabajo materializado en papel, sino, una guía para el trabajo diario de la Municipalidad de la ciudad de Guatemala.  

Seguidamente, Santiago Lorenzo, Jefe de la Unidad de Cambio Climático en la División de Desarrollo Sostenible y Asentamientos Humanos de la CEPAL, presentó sobre que ya es conocido que el cambio climático en la región, especialmente en Centroamérica, es muy vulnerable, siendo muy importante enfrentarlo, y una buena forma es a partir de la adaptación preparándose mejorando la resiliencia y la de los ecosistemas. La elaboración del PAC es fundamental para salir mejor librados de los cambios climáticos que ya se están suscitando. Santiago Lorenzo enfatizó también sobre “lo que sí está en nuestras manos es prepararnos con mejores capacidades y mejor manejo ecosistémico”. Así mismo, comentó sobre que el cambio climático “nos la jugamos en las ciudades” ya que en ellas se concentran las actividades económicas, por lo cual es muy importante la proyección de acciones bajas en carbono, que conlleven co-beneficios.

Por su parte, Natalia Villamizar, Coordinadora de la iniciativa MCR2030, de UNDRR, comentó que se vive actualmente en un mundo cada vez más urbanizado y globalizado, por lo que la naturaleza del riesgo ha cambiado. En las ciudades se manifiesta esa naturaleza sistémica del riesgo, pero también existe la oportunidad de tener una respuesta sistémica, que no tiene que ver solo con la mitigación, sino también con la preparación y la construcción de resiliencia. Así también, Natalia Villamizar enfatizó que las ciudades y los gobiernos locales tienen esta capacidad de liderar la transformación del escenario global, por lo que la iniciativa MCR2030 permite la colaboración con múltiples actores para fomentar la resiliencia a nivel local, a través de la promoción de políticas y estrategias para la implementación, por lo que la elaboración del PAC de la ciudad de Guatemala es un ejemplo de esta colaboración, como una oportunidad de recuperación post pandemia, más sostenible y baja en carbono.

Los dos talleres fueron moderados por Aline Lusieux Alves de Oliveira, consultora de UNDRR, con apoyo de Sebastián Ordoñez, consultor de CEPAL, quien está elaborando el PAC de la ciudad de Guatemala. Durante el primer taller fueron abordados dos puntos principales. El primero, enfocado en la identificación, comprensión y uso de escenarios de riesgo actuales y futuros, a partir de: documentación de peligros, exposiciones y vulnerabilidades e información de riesgo local; documentación de activos críticos y dependencias entre estos; comprensión y presentación comunes de los escenarios y narrativas del impacto total de una amenaza en la ciudad. El segundo punto abordado, estuvo enfocado en salvaguardar los amortiguadores naturales para mejorar las funciones protectoras que ofrece el capital natural, a partir de: conocimientos generales sobre las funciones de los ecosistemas; uso de la infraestructura verde y azul en proyectos de infraestructura y desarrollo urbano; ccuerdos relacionados con ecosistemas entre ciudades.

Para el segundo taller, se abordaron diez aspectos esenciales, enfocados en la resiliencia de los servicios de salud pública: los profesionales de los sistemas de salud pública forman parte de la gobernabilidad para la gestión del riesgo; inclusión de las emergencias y los desastres de salud pública (brotes de enfermedades, pandemias, hambrunas, escasez de agua, etc.) como un escenario de desastre por sí mismo; financiamiento para los aspectos de resiliencia de la salud pública; conformidad con los códigos de ordenamiento territorial y construcción resiliente por parte de los principales centros de salud; preservación y gestión de servicios de ecosistemas que ofrecen beneficios a la salud pública; disponibilidad de destrezas relativas a la salud pública; eficacia del sistema de salud pública para hacer partícipe a la comunidad en el contexto de un desastre; fortalecimiento de los elementos de la infraestructura; sistemas de alerta temprana para emergencias relacionadas con la salud; mitigación del impacto a largo plazo en la salud pública.

Diferentes actores invitados, dialogaron, de forma interactiva, sobre estos puntos principales a lo largo de los dos talleres, rescatando varios aspectos principales, como: los principales eventos de peligro en la ciudad se concentran en las inundaciones;  los servicios/sectores más afectados de la ciudad son la vivienda, salud, asentamientos, agua, infraestructura agrícola, entre otros; existe un entendimiento del valor de los bosques en la ciudad, valor como reguladores del ciclo hídrico y captadores de carbono, habiendo zonas que se han recuperado y se han construido parques ecológicos. En lo referido a los servicios de salud pública, se conversó sobre: la pandemia aplicó nuevos desafíos y mejoró las acciones de gestión de riesgo; la integración por la pandemia mejoró; se desarrollan más medidas de prevención; el conocer los beneficios ambientales que brindan los espacios verdes como la mejora de la calidad del aire, y la disminución de la contaminación acústica que tienen efectos perjudiciales para la salud.

De esta forma, el resumen de la sesión fue hecho por Estefani Rondón, consultora de la Unidad de Cambio Climático de CEPAL y coordinadora del proyecto a nivel regional, abordando primeramente los puntos principales comentados en el taller, agradeciendo a todos los presentes por haber participado, enfatizando sobre las perspectivas dialogadas, en cuanto a la vulnerabilidad y las áreas verdes, estás últimas, de gran importancia, ya que conservando y restaurando los ecosistemas, los cuales nos sustentan,  sería posible contar con mejores sistemas de defensa para la no propagación de enfermedades, enlazado también con la importancia de los servicios de salud pública para actuar de forma activa en la creación de resiliencia, minimizando los riesgos derivados de los efectos del cambio climático.